El mayor acceso a servicios de voz y datos en España se realiza mediante las redes fijas. Los operadores están reemplazando la red de cobre por fibra óptica a fin de poder ofrecer mayores velocidades de conexión. Por su parte, los operadores de cable también invierten en mejorar sus prestaciones.
El acceso a los servicios de voz y datos sigue llevándose a cabo de manera mayoritaria en nuestro país a traves de la red fija. La infraestructura tradicional para estos servicios ha sido la red de cobre, pero sus limitaciones han provocado que paulatinamente este material se esté sustituyendo por otras tecnologías basadas en la fibra óptica.
De esta forma, los accesos de cobre, todavía mayoritarios en España y que conectan al abonado a una central, está viéndose complementados paulatinamente por un sistena de nodos remotos que a su vez se hacen cargo de unos cientos de bucles todos conectados a través de la fibra óptica. Este infraestructura, denominada FTTN, consigue aumentar la velocidad y, en general, lograr una mayor calidad de prestaciones tanto en las antiguas zonas de servicio como en otras nuevas que las solicitan.
Tanto la operadora tradicional Telefónica como sus competidoras han centrado sus esfuerzos de los últimos años en invertir en esta tecnología, y finales del año 2010 habían logrado un total de 524.370 accesos de los llamados FTTH, es decir, consistentes en el despliegue de red de fibra óptica directamente hasta el abonado.
Por su parte, los operadores que optan por una tecnología HFC, es decir, con fibra hasta un nodo y a través de un cable coaxial hasta el abonado, han mejorado igualmente sus prestaciones hasta lograr una velocidad de más de 100 Mbps gracias a una inversión en nuevos equipos y accesos mediante la llamada tecnología DOCSIS, de la que ya dispone el 72% de su red.